El plagio

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Imagina que Luis tiene que  hacer un trabajo sobre diferentes razas de perros. Encuentra en Internet una página con información muy buena así que la selecciona y la copia en su documento, cambia el tamaño y estilo de letra y prosigue con tu trabajo.

¡Cuidado! Luis cometió un grave error, cometió plagio. El plagio es usar palabras o ideas de otras personas haciéndolas pasar por tuyas. Esto no está permitido en ningún nivel educativo, ni en ningún otro lado. 

Usar ideas de otras personas sin darles el crédito necesario es un engaño. En el caso de Luis, debió haber citado al autor y mencionado la página de Internet de donde sacó la información. ¿Por qué? Porque antes de investigar él no conocía esa información, por lo tanto, no son ideas propias.

Nunca pensarías en robarle la comida a alguien, pues las ideas y palabras también son propiedad de otra persona. 

¿Qué se debe hacer entonces? Siempre que tomes la idea de alguien más para incluirla en tu trabajo, debes añadir una cita, tanto del nombre del autor, como de la fuente de donde la obtuviste, ya sea una página de Internet, un libro, periódico, película o canción que consultaste.

¿Por qué se da el plagio?

Ante el aumento de casos de plagio entre los universitarios, se realizó un estudio para conocer cuáles son las causas por las que se comete plagio.

Las razones más frecuentes son: obtener mejores calificaciones, por pereza, por falta de organización del tiempo para realizar trabajos, por la facilidad de acceso a material en Internet  y, finalmente, por desconocer las normas básicas a seguir para la elaboración de un trabajo académico. 

En otros casos, el plagio puede darse porque nos sentimos inseguros de nuestras ideas y pensamos que las de otras personas tienen mayor valor que las nuestras. Sin embargo, las ideas de todos son valiosas y muchas veces tendremos mejores ideas que las que ya han sido publicadas.

Utilizar palabras e ideas de otras personas sirve para validar las nuestras, eso quiere decir que hay más personas que opinan lo mismo que nosotros.

Algunas formas de plagio son: utilizar palabras de otro sin indicarlo en forma de cita en el texto o citar la fuente en la bibliografía, presentar ideas originales de otro, de manera modificada, sin citar la fuente, falsificar palabras o ideas de otros, citar incorrectamente la fuente de información, simular ser el dueño del trabajo de otro.

Listos para no plagiar

No hay que permitir que el miedo al plagio nos detenga a seguir investigando, sólo recuerda que toda información que encuentres y planees usar en tus trabajos debe ir citada. Hay diferentes formas de citar, las más sencillas y adecuadas para alumnos de nivel básico son:

Poner entre comillas las palabras que no son tuyas y poner el autor o el libro. 

Ejemplos: 

  • “Que la fuerza te acompañe” Obi Wan Kanobi en Star Wars.
  • Como dice Poseidon en el libro Percy Jackson y el ladrón del rayo “Al mar no le gusta que lo contengan” (Rick Riordan).

Para citar un trabajo científico, además de usar comillas, se menciona al autor y año en que lo publicó, entre paréntesis:

  • “Cada día crece la preocupación porque la mayoría de los estudiantes rechazan la lectura“ (Barbosa, 2013).

o bien: 

  • Barbosa (2013) menciona que cada día crece la preocupación porque la mayoría de los estudiantes rechazan la lectura.

Como ves, citar a un autor y una fuente no es difícil y enriquece mucho nuestros trabajos.

Bibliografía: